¿Sabías que el rey Carlos de Austria vino a Mataró a conocer a la que fuera su esposa Elisabeth Cristina de Brunswick? La princesa llegó a la ciudad el 25 de julio de 1708 en plena fiesta mayor y se hicieron grandes celebraciones con fuegos artificiales, bailes y música. Pero la primera noche en Mataró se convirtió en una pesadilla para Elisabeth por culpa de los mosquitos, hasta el punto que al día siguiente no se atrevió a recibir al rey que sería su futuro marido. Conoce la historia de Mataró a través de anécdotas como esta y de lecturas, paseando por sus calles, edificios y plazas y disfrutando de sus rincones más singulares.
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Precio: actividad gratuita
Información y reservas para grupos: Oficina de Turisme de Mataró
